sábado, 15 de agosto de 2015

Lluvia

Coautora Pilar Darrigran
Juntas creamos nuestro propio mundo
Gracias

Lluvia, lluvia, ¿por qué no paras? ¿por qué lloras?
Lluvia maldita, ¿acaso me acompañas?
Si es así, ¿lloras conmigo o yo contigo?
No te entiendo, ¡ay! Te maldigo.
Lo hago y lo haré eternamente; pero a la vez te agradezco que no me dejes.
Por lo menos tú me consuelas en su ausencia.
Agradezco tu presencia.

Me limpias el alma con tus lágrimas,
¿Haré yo lo mismo con las mías?
¿Pararé alguna vez de llorar como tú de llover?
Sino paro, tú seguirás a mi lado
Lluvia hermosa, lluvia mía
Juntas ahogaremos la tristeza
Lluvia cuantiosa, lluvia amiga.

Pero antes dime,
Lluvia niña, ¿quién te hirió de tal manera?
Acaso el sol con su mirada altanera.
Acaso fue el viento con su brusca manera.
O fue la nieve con su violencia.
O fue el mar con su impaciencia.

Ay lluvia, porque no dejo de decirte tonterías
Tonterías para aliviar mi corazón
Ay lluvia, temo estar diciendo habladurías.
Temo estar perdiendo la razón.
Pero, ¿y si ya la he perdido?
¿Y si nunca la he tenido?

Menos mal, lluvia amiga, que te tengo aquí conmigo
Y no allá con otro
Lluvia, por favor, no me dejes
Tengo miedo que te alejes,
Y me dejes como aquel.

Al fin de mi alma estoy por llegar
Lluvia, ¿por qué no paras?
¿Por qué lloras?
Si yo he parado.
Ya ha llegado a su fin mi tormento personal.
Y mañana tu también,
El sol acabará contigo.




No hay comentarios.:

Publicar un comentario